Ya estoy en la soleada California. He llegado a San Francisco y aquí no estaré acompañado por Univision, una lástima, pero me da un poco igual porque el hotel donde me encuentro es una pasada. No es un gran lujo, ni nada de eso, sino muy trendy y fashion. Se llama Diva y está muy cerquita de Union Square. Os sacaré más fotos pero ahí va una de la cortina que cubre la ventana de mi habitación… ¿no es lo más?
No es un poster…es una cortina!
El hotel está en la calle Geary en la que también hay varias galerías de arte. Me he sorprendido cuando he visto escaparates mostrando obras de Wharhol, Picasso o Miró dentro de los lotes que se subastan. Es todo un acierto y un reclamo que sean expuestas de esa manera.
Union Square me parece que va a ser mi punto de partida para ir conociendo la ciudad, pero antes de meterme en el bullicio de Chinatown ya he notado que aquí se respira una tranquilidad imposible en la Gran Manzana y que es sensiblemente más barata a la hora de comer.
Y empezamos…
Dia 1
Dando una vuelta por Union Square veo a lo lejos una especie de templete chino. Cuando me acerco veo que es un pórtico de la calle Grant que nos abre el paso a Chinatown. En esa calle, que es la principal, hay una sucesión de tiendas de imposibles lámparas, pomposas decoraciones, comida oriental, relojes y un largo etcetera de productos asociados con el lejano oriente. Grant es la calle más turística pero toda la zona, algo más de 10 manzanas, están repletas de vida oriental.
La calle tiene un cruce con Lombard que es conocida por un famoso tramo lleno de curvas que aparece en muchas películas y es uno de los símbolos de identidad de la ciudad. Recuerdo al cochecito Herbie recorrerla en una de sus películas. Lombard me hace ver que hacer turismo por esta ciudad no será tan sencillo, el tiempo me acompaña, pero las subidas y bajadas (47 colinas) la convierten en un estupendo modo de perder peso.
Más llana es la zona de Fisherman’s Wharf, al borde de la bahía y preparada perfectamente para el turismo. Llenísima de tiendas y restaurantes es una cuidadísima zona lúdica. Es allí, un precioso muelle, donde nos encontramos con unos simpáticos leones marinos.
Cerca de allí está el Aquatic Park con otro muelle que me muestra la primera imagen, (y qué imagen) de la estrella de la ciudad: El Golden Gate.
Alucinante..¿verdad?
Para acabar la tarde, y otra vez nos hemos pegado una caminata de impresión, nos damos un paseo por la zona financiera donde lo más destacado es el edificio más alto de la ciudad, la torres Transamerica Pyramid. Con sólo 48 pisos es el techo de la ciudad pero es normal que haya poco rascacielos, estamos en una zona donde ha habido varios terremotos y las edificaciones son más bien bajas.
En un primer vistazo, bastante amplio, me he enamorado de San Francisco. Lo intuía ya que al llegar, además de tranvías llenos de gente, he visto una manifestación nudista. La ciudad promete.
Dia 2
Desde Madrid ya teníamos contratada la excursión a la isla de Alcatraz. Un barco te lleva a la isla y allí te dan unos casquitos para seguir la visita. Os digo que por 26$ es una atracción turística que vale cada penique que se paga, en serio, no es nada cara por todo lo que ofrece. La visita a la que en otro tiempo fue una famosísima prisión de alta seguridad es toda una experiencia y está montada de una manera magistral.
Muelle de llegada a Alcatraz
Cartel de bienvenida
Torreta con maniquí incluido
Galeria
Vista de la ciudad desde la costa
Vista de la isla de Alcatraz.
La cárcel se cerró en 1963 y con el tour recorres las duchas, las celdas, las oficinas administrativas, el patio…es impresionante y todo está muy bien explicado. Me he quedado muy satisfecho y las vistas que se tienen desde la isla son ciertamente alucinantes aunque no son las únicas espectaculares que veré hoy.
Y el turismo no acaba ahí. Al salir un regalo que me hacen desde Madrid (Gracias Matías!) que consiste en conducir un cochecito, que en realidad funciona como una moto, que tiene incluido un GPS con diferentes rutas de la ciudad. Durante 5 horas he recorrido los puntos más alejados del centro y he obtenido unas fotos impresionantes.
¿la hormiga atómica? Noooo Maxi!
Con niebla
Más niebla
Impresionante Baker Beach
Lo primero era dirigirnos al Golden Gate y ha sido toda una experiencia hacerlo en el cochecito porque nos quedábamos con todo el mundo. Nos saludaban, nos sacaban fotos…¡Eramos las estellas!. Desde Crissy Field hemos tenido la primera visión, pero como véis la niebla de la ciudad no nos ha ayudado mucho.
Más impresionante es la vista desde la preciosa, me ha dejado impresionado, Baker Beach. Además aquí he conocido por primera vez el Océano Pacifico abierto, ya que hasta entonces todo lo que había visto era la bahía. Impresionante es también Ocean Beach a la que llego después de pasar por el Lincoln Park y su palacio de la Legión de Honor.
Hay dos parques impresionantes en San Francisco. El Golden Gate Park, con una estructura similar al Central Park de Nueva York, fue diseñado por el mismo señor, pero un 20% más grande. Hay muchas cosas dentro del parque pero su composición y su vegetación es lo que más me impacta.
Las vistas más espectaculares de la ciudad, cuando no está nublado, se obtienen desde Twin Peaks. No hay palabras, solo imágenes, sólo comentaré que ha sido la parte más divertida del trayecto ya que desde los “tranvías” que subían todos los ocupantes nos animaban pues las cuestas ponían en cuestión la capacidad de nuestro vehículo.
San Francisco desde Twin Peaks
Alamo Square…atención tele ádictos!
De allí a Alamo Square, con una famosa estampa y rumbo al parque de Presidio, el otro tesoro verde de una ciudad que me ha parecido absolutamente maravillosa. Hoy hay menos texto y más fotos pero merece la pena ¿no?