Me enorgullezco bastante de lo que sé para aceptar con modestia que hay muchas cosas que ignoro
Después de bastante tiempo, aquí estoy otra vez, y lo hago con otra entrega de mis lecturas de este irregular 2020. Será un año para olvidar por muchos motivos, pero nos gustará quedarnos con lo bueno que nos ha pasado. No es mucho, pero hay pequeñas cosas, como los libros y las historias que encierran, a las que podemos agarrarnos. Igual que siempre, un poco de todo, desde escritores ya muy conocidos a recomendaciones de voces autorizadas, desde el superhéroe más grande de todos los tiempos a uno de los clásicos más indiscutibles de la literatura del siglo XX y todo ello sin olvidarnos del Madrid que conoció cierta actriz americana.
Como siempre, no son sinopsis sino impresiones, que son cosas muy distintas.
Las partículas elementales
Michel Houellebecq

Novela
Anagrama compactos.
Edición 2019, originalmente publicada en 1998
328 págs.
Los varones de más de 40 años los tienen difícil en el oscuro universo del escritor francés. Hastiados de la vida, del sexo y con el cinismo a flor de piel, sus libros están llenos de personajes que se ganan a pulso un grado tal de antipatía que al final uno consigue tener de ellos una impresión más de tristeza que de repulsión.
Trata sobre la vida paralela de dos hermanos que se toleran pero que llegan a la madurez con el mismo desencanto. Uno lo ha tenido todo en lo profesional y el otro ha sobrevivido con esfuerzo y superando una infancia terrible y ambos llegan a la madurez completamente infelices. Una historia que presenta la desesperanza, con mucho humor negro y mala baba, de dos víctimas del mayo de 1968, dos muchachos abandonados por una madre que se entregó a la vida de las comunas y al movimiento hippie dejando de lado cualquier responsabilidad sobre ellos. Este es el improbable nexo que une al cuasi perfecto Michel con el rudo Bruno.
Su segunda novela nos enseña lo que será una constante en la obra del escritor y sienta las bases sobre lo que giraran prácticamente todas las leídas: un feroz crítica a la sociedad occidental europea actual, particularmente la francesa y los estragos de la parte menos positiva de la globalización.
Houellebecq es un personaje polémico en Francia y no son pocos conocedores de la cultura de aquel país que me han torcido la boca cuando he mencionado que lo he leído. En la película Thalasso (2019, Guillaume Nicloux) que he podido ver en Filmin, se interpreta a sí mismo compartiendo plantel con otro de los odiados oficiales del país galo: Gérard Depardieu. En un pasaje de la película, bastante caótica y ambientada en uno de esos balnearios tan presentes en su bibliografía, un anónimo se acerca a ellos diciéndoles muy vehementemente: “Son ustedes la vergüenza de Francia”. Un resumen bastante sintetizado de lo que buena parte de la opinión pública opina de él y que aparentemente le importa un bledo. ¡Viva la incorrección política!
Otros libros leídos del autor: Ampliación del campo de batalla (1994), Plataforma (2001), Sumisión (2015) y Serotonina (2019).
Dos hermanas
David Foenkinos

Novela
Alfaguara
2020
160 págs.
Lo mejor de este autor es que cada novela suya es distinta a la anterior. Si bien pueden tratar de dramas más o menos comunes, todas son muy diferentes entre sí y salvo por unos interesantes personajes femeninos, no encuentro un vínculo entre ellas más allá del buen hacer.
Dos hermanas ha sido el único que no he podido/querido acabar. El personaje principal, Mathilde, es tan insufrible que no me ha interesado lo más mínimo. Después de dramas familiares varios, resulta que se vuelve literalmente loca por una ruptura sentimental. En pleno siglo XXI los desequilibrios por amor me parecen irreales y las «doñas perfectas» a las que un cambio las vuelve locas no me causan ni la más mínima simpatía. Me han contado cómo acaba y me alegro de no haber perdido más el tiempo y haberlo dejado a tiempo.
Otras obras leídas del autor: La delicadeza (2011), La biblioteca de los libros rechazados (2017) y Hacia la belleza (2019)
Ava en la noche
Manuel Vicent

Novela
Alfaguara
2020
256 págs.
Entretenida novela que se lee del tirón y que ya por el escenario, el Madrid de los 50 y 60, me tuvo enganchado un par de tardes. David, un enamorado del cine, recorre las calles de la capital, que despierta tras los años más oscuros de la posguerra, en busca de dos fantasmas. Un criminal ajusticiado y la actriz a la que se denominó el animal más bello del mundo.
Lectura ágil, libro que se devora en horas, en el que el protagonista recorrerá una ciudad que ya nunca volvió a ser la misma y que me trae nostalgia de un Madrid que no he vivido y que hoy es, desgraciadamente, un Madrid a medias.
Un acercamiento más a una época que retrata muy bien la serie Arde Madrid, que causó sensación hace un par de años y que se acercaba a aquellos años desde el humor, pero con un rigor que sorprendió hasta a los más críticos con Paco León, su verdadero artífice.
Superman
Brian Michael Bendis (guion), Ivan Reis, John Romita Jr y otros (dibujo)

Serie de cómics
DC cómics publicado por ECC cómics
2019 – 2020
Grapas de 48 págs.
Superman ha sido, para muchos de los que amamos los cómics, un personaje tan conocido como aburrido. Tan poderoso, tan perfecto, tan carente de claroscuros que al compararlo con otros personajes de DC, Batman sin ir más lejos, o algunos de Marvel siempre dejaba en un lugar inferior en interés al superhéroe que, por otra parte, es uno de los iconos más importantes, sino el más, que tiene el noveno arte.
Tras muchos años («nació» en 1938) que no se recuerdan y han caído, salvo excepciones, en el más absoluto ostracismo, en los 80 el personaje se redefinió haciéndolo más humano y menos poderoso, el guionista y dibujante canadiense John Byrne, el artífice de aquel cambio, se ganó muchos galones con su acercamiento a un personaje que, en muchos aspectos, y aunque le hayan matado y cambiado de uniforme, es bastante intocable para un guionista.
Brian Michael Bendis, uno de los más famosos y discutidos guionistas actuales, hace hoy con Superman algo que hizo el propio Byrne en los 80 y redefine el personaje por enésima vez, consiguiendo hacernos recuperar el interés por el personaje. Con 20 números publicados, estamos ante una de las mejores etapas del héroe de los últimos años. Superman, que ya es padre, se enfrenta a su pasado kriptoniano, recupera conceptos clásicos como la añorada Legión de Superhéroes y, en un giro sorprendente, se descubre como Clark Kent ante el mundo. Los últimos números publicados, desde el 17 al 20, son absolutamente geniales.
Un guion fabuloso, Bendis ya revivió a Los Vengadores en Marvel, y un dibujo espléndido con un Iván Reis que está como nunca, hacen de este un cómic de los que crean, quién lo iba a decir, afición. Un tebeo como los de antes, entretenido, con calidad y sin ínfulas.
El escritor Javier Cercas recomendaba en Dos libros y una sola canción (16/08/2020) dentro de sus Palos de ciego que da desde El País semanal, intentar sentirse triste escuchando la siguiente canción y la lectura de las dos siguientes novelas. A Cindy la tengo muy escuchada y seguí a pies juntillas las recomendaciones de una voz tan autorizada. A tenor del éxito, lo volveré a hacer si alguna otra vez le da por recomendar lecturas.
Un hipster en la España vacía
Daniel Gascón

Novela
Random House
2020
160 págs.
¡Qué saludable es leer algo con tanto humor en tiempos tan oscuros! Un hipster de libro (¿siguen existiendo?) se traslada a un pueblo de Teruel donde pretende poner en práctica todo lo que damos por sentado en algunas zonas de nuestras grandes ciudades.
El mismo choque, con mucho menos humor, y en sentido contrario, que veo yo en Cayetanos (Nunca agradeceremos más a Carolina Durante haber renombrado al pijerío patrio) que llegados de Madrid convierten un agradable chiringuito playero en un moni-sitio con terraza en la Puerta de Alcalá con copas desde 15 euros en adelante.
Lo mejor es el debate que suscita aquello que damos por bueno, por lógico y por sostenible no siempre es bueno, lógico y sostenible cuando los sacamos de las cuatro esquinas de Malasaña. Un libro que se lee con una sonrisa de oreja a oreja y que se acerca la dualidad campo versus ciudad de una manera hilarante, mostrando el día a día de un urbanita con el que nos encontraríamos en la (muy cool) librería Tipos Infames convirtiéndose en alcalde de un pueblo de la España vacía.
Es un gustazo soltar una carcajada mientras se lee y esto es algo que me ha pasado mucho con este libro, que menciona en el título un término, el de España vacía, que ha generado muchísimo debate y que acuñó en un ensayo del mismo nombre el autor que viene a continuación
La piel
Sergio del Molino

Ensayo
Alfaguara
2020
240 págs.
Vivir es el proceso mediante el cual perdemos la pureza. Nacemos con ella y la vamos estropeando con cada pequeña traición, cada mentira, cada fracaso y cada rencor
La piel es nuestro órgano más extenso y el primero que ve nuestro entorno, sufrir una enfermedad en ella puede suponer un estigma y debilitar nuestra estabilidad emocional. El libro, sin perder un segundo en dramatizar la situación, sirve al autor para contar su experiencia, y la vivida por otros ilustres, con la psoriasis.
Es un libro maravilloso del que se aprenden un montón de cosas y que nos cuenta con crudeza, humor e ironía un doloroso asunto. Personajes históricos que sufrieron la enfermedad y cómo ello condicionó sus acciones y reacciones. Desde Murat a Nabokov pasando por Stalin, la Reina Isabel II o la cantante mencionada un poco más arriba. Además de entretenido es un libro del que se aprende muchísimo. El autor es quien, con La España vacía, puso un debate encima de la mesa que no existía hasta ahora y que con tanto humor trataba la lectura anterior.
Uno de los capítulos, el dedicado al racismo, merecería editarse aparte y repartirse gratuitamente además de ser materia de estudio en los colegios. Así lo compartí con el autor cuando acabé de leerlo. Es el libro que más he recomendado estos meses, un 10. Uno de los mejores los libros de este extraño 2020 y toda una inspiración para volver a un libro casi 30 años después….
Lolita
Vladimir Nabokov

Novela
Anagrama compactos
1991 – 2020. publicada originalmente en 1955.
392 págs
Casi 30 años separan ambas ediciones y 26 han pasado desde que leí por primera vez Lolita. He vuelto a la novela gracias al libro de Sergio del Molino y me alegro mucho de haberlo hecho porque hoy valoro esta obra maestra de la literatura del siglo XX mucho mejor que con los pocos más de 20 años que tenía cuando me acerqué a ella por primera.
En los tiempos de la corrección política, de los ofendiditos y de la descontextualización, hay cierta urgencia en leer según qué libros no vaya a ser que los prohíban. Menos mal que ya he visto Lo que el viento se llevó y que soy de los que fue al cine a ver E.T. el extraterrestre y vi la obra íntegra y no esa que se puede ver ahora en la que los cigarrillos se han borrado digitalmente. Por cierto, que vi la película muy joven, vi a fumadores en la pantalla y no he fumado jamás. Con Lolita pasará algo parecido, cualquier día aumentarán la edad de la protagonista y santas pascuas.
No me siento autorizado para escribir sobre Lolita, es una obra tan compleja, tan conocida y tan magnífica que seguro ha sido motivo de tesis doctorales y estudios sesudos sobre sus interesantes personajes. Es indiscutible que su trascendencia es fundamental y que en relativamente poco tiempo ha creado un estereotipo, un personaje que ya forma parte de la cultura popular y con el que define, no en pocas ocasiones y de manera incorrecta, a determinadas chicas muy jóvenes.
La edición de 1991 que reproducía en su portada la caratula de la película homónima, con guion del escritor y dirigida por Stanley Kubrick en 1962, fue un regalo cumpleaños que aun conservo como una joya de mi colección.
Como quien más y quien menos ya sabe de qué va, no me extenderé en Humbert Humbert, su nínfula y otros personajes que completan un conjunto algo grotesco pues si hay algo común, por mucho que apelemos a la inocencia de la niña, no hay ni un personaje positivo en la novela. Las citas que abren y cierran esta entrada son del libro, su prosa es tan increíble que merecería abrirse, como Rayuela, por cualquier parte y deleitarse con la manera de escribir de Nabokov.
Fue un libro prohibido por impúdico y pornográfico que se publicó en París en 1955, lo hizo la editorial Olympia, y al que ha perseguido la polémica hasta que los libros han dejado de interesar.
Mi coche ya no puede más, Dolores Haze
Y la última etapa es la de más dificultad
Me quedaré tirado donde se secan las hierbas
Y solo habra para mi putrefacción y eternidad